jueves, 19 de noviembre de 2009

Una piña al corazón


El estoico Ciclón pegó bien y primero buscando la final de la Sudamericana, con anotación de Lucho Cáceres a los 4' del primer tiempo. A partir de la anotación se jugó el partido que quiso el cuadro de Peter, que aguantó casi todo lo que pudo. A los 47' del segundo período, cuando parecía que la historia se encaminaba hacia los penales, llegó Gum para sellar el empate en la revancha y 2-1 en el global. Cerro movió del medio, jugado, y con Barreto _la figura_ sumamente jugado, Alan consiguió el segundo brazuca. Con el resultado puesto, hubo un campal que involucró en igual medida a locales y cerristas. No debía haber terminado así. En ningún alcance de la expresión.
Cerro Porteño se juramentó la épica remontada, el pasaje a la final. Y que se crea que esa disposición se notó desde el principio. A la primera llegada clara, precisamente a los 2 minutos, Nanni se le adelantó a Lucho Cáceres y conectó de cabeza. Fue desviado, pero si dejaba pasar, el 8 llegaba con todo el arco en línea frontal.

¿Fluminense? Muy a lo guapo, quietito y encima entrando en ese juego argel, el de la vendeta, haciéndose desear (tardó tres minutos en ingresar al campo).

Con el Maracaná entusiasta, bien rojiverde pero con el aliento de los valientes azulgranas, llegó la sorpresa a los 4. Julio Irrazábal, como siempre, no temió a nada y ganó raya de fondo, en un hecho que no debe sorprender sencillamente merced a que el Ciclón debía ser protagonista. Nanni de vuelta recepcionó y si bien se ensució la acción mediante intervención rival, el rebote le quedó a este Lucho Cáceres que no hizo otra cosa que ratificar que ofensivamente pesa más y mejor. Le metió así, de fino, sin dudar y gol. Gol de Cerro y a otra cosa ¡Bienvenido a otro partido!

En ese contexto Flu insistió, fue encima del arco cerrista, y en un pasaje como 16 saques de esquina efectuó. Del otro lado, el Mono cabeceó claramente y el balón por poco no entró. Contadas tres tapadas, nada exagerado, todas claras, Barreto sacó pecho y de vuelta se erigió en la figura más distintiva del match.

¿Cerro aguantó? Sí, se dedicó a eso. Lo hizo en varios pasajes muy cerca de su arco, pero no de forma inconciente, ya que fue el adversario el que lo obligó. Tuvo poquísimas posibilidades de salir de contra y con muchos quebrantos, pero todavía más trabajo colectivo, sacó adelante el encuentro.

La etapa complementaria se presentó más movidita todavía. Definitivamente, el local fue dueño y señor del lance, le llegó a Barreto con insistencia aunque eso no va relacionado con que haya sido con claridad. A los 5', Cerro tuvo la única y más importante con Nanni como protagonista. Ante un control incómodo, giró y su remate se fue bien arriba. Lucho Cáceres fue gambeteando, ganó en velocidad y cuando llegó al arco le faltaron pilas, en quizás la otra situación destacable.

A Flu siempre le costó quebrar el cerrojo paraguayo. Le sentó bien a Cerro esa disposición táctica, muy sacrificada, arraigada al sufrimiento contínuo, pero a la vez fiel representante de un convencimiento. Desde el momento del gol, Peter Troglio firmó el empate en el marcador global, en el partido grande. Y así el intento fue aguantar hasta la llegada de la tanda de penales.

Núñez le dio aire al andamiaje de ataque reemplazando al Tigre. Celso Ortiz hizo lo propio en el medio sector por lo que, de esa forma, Cerro renovó ganas para seguir siendo fiel al libreto, que sucumbió al minuto 2 del tiempo agregado. En una jugada llena de rebotes, sin querer le pegó el balón a Villarreal, y de allí surgió el remate de Gum, para clasificar a Fluminense decretando el 2-1 global.

Los brasileños quisieron _y de hecho lo hicieron_ tardar 3 años para mover del medio, y el que nunca va a cambiar, el que siempre fue malo y no tiene solución alguna como Carlos Chandía, amonestó a un par que por poco no puso reposera en campo cerrista para tardar la reanudación. Alan, con Barreto como último hombre y en campo rival, ganó en velocidad y puso el segundo de su equipo.

Ese tanto puso punto final a la ilusión paraguaya e inició un campal triste, que involucró a los jugadores de ambos planteles. Así, Flu visita en el juego de ida en esta finalísima a Liga o River, definiendo en Río.

fuente:Teledeportes Paraguay

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